Unos días más tarde, el joven, intrigado por el enigma de las piedras, decidió crear unos anillos con ellas. Al usarlos tuvo visiones alucinantes; la Vaconauta lo iluminó y el joven fue transportado a una sociedad de vacas.
Las vacas habían optado por vivir experiencias y no quedarse con sueños por cumplir. Como resultado, habían encontrado la clave para la felicidad. La música y los eventos de entretenimiento eran magníficos y gigantescos; asistían en grupos, sin embargo, cada una había encontrado el espacio para ser ella misma.
Así, dejaron atrás todas las cadenas de prejuicios y renacieron como una sociedad libre dispuesta a compartir la llave de su felicidad con otros mundos.
El joven quería compartir este descubrimiento con todos. Sin embargo, reclutar a otros fue un reto. Con el tiempo, las pocas personas que de verdad creyeron en él recibieron sus anillos hechos de piedras intergalácticas. Así, uno a uno, experimentaron la apertura de la iluminación y se unieron a la misión de traer la felicidad a la Tierra: cumplir tus sueños, disfrutar con amigos, ser tú mismo. Así nació "La Sociedad de la Vaca Sagrada" (S.V.S).